Pueden cambiar muchas cosas en el Madrid, podrá cambiar el entrenador, el presidente, los jugadores...pero hay una cosa que no cambia: lo único que le preocupa al abonado del Bernabeu es ganar el partido. Va ello unido al extracto social al que pertenece, ese taxista, aquel encofrador, etc. están toda la semana aguantando a su jefe, a su contraria, a los niños, la única escapatoria que tienen es el Madrid, y sobre todo que gane. Por ello el Madrid ayer salió del campo con aplausos, pese al juego, pese a tener que remontar robando al Osasuna, pese a Calderón. Creo que Calderón se ha precipitado, debería haber mirado hacia otro lado, seguir con le conspiración judeo masónica y acabar con su mandato, porque si el Madrid gana dos o tres partidos seguidos, la gente no abre la boca. Ahora le ha puesto en bandeja su trono a su gran enemigo, quien el Domingo de Ramos(Sergio) entrará en Jerusalén bajo ramas de olivo y en lor de multitudes, aunque puede que le crucifiquen junto a dos ladrones...
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