lunes, 20 de diciembre de 2010

KFC

No sé dónde leí que la diferencia entre el fútbol del Barça y el Madrid se podía comparar con ir al Bulli y después al Kentucky Fried Chicken. Esta comparación que venía a cuento con el fútbol desplegado por ambos, también lo podemos extender a los banquillos. Pese a que, en apariencia tanto Guardiola como Mourinho visten de forma elegante, cuando abren la boca se vuelven a evidenciar sus diferencias. Porque Mourinho ha venido a España a ser adorado, a que le adulen, a que le acepten en su iras y sus salidas de tono. Definitivamente anoche me di cuenta de que ha venido al lugar equivocado. No fue un partido bonito el del Bernabéu, a las dificultades del equipo blanco para circular la pelota, ausente Xabi Alonso se unió a que el Sevilla de Manzano, consciente de sus limitaciones y el bajísimo estado de forma de alguno de sus jugadores, decidió no ir a por la victoria e intentar garrapiñar un empate. Así le fue saliendo la jugada al Sevilla, hasta que Clos Gómez, árbitro malo dónde los haya, decidió expulsar a Carvalho cuando no debía (tenía motivos más que suficientes en la entrada del minuto 43 a Negredo) y , curiosamente, se desmontó el planteamiento del Sevilla. El Madrid se desbocó y el Sevilla no supo ir a por el partido, muy limitado en la construcción. Una jugada aislada de DiMaría resolvió y ahí murió el Sevilla y un partido digno de la Liga de Vietnam.
Lo peor estaba por llegar. Salió Mou enfurecido con un papel escrito, dónde según él estaban los 13 errores graves del árbitro. Evidentemente nadie le preguntó, dónde tenía esa lista después del partido de su compatriota Benquerença en la ida de las semifinales de la Champions contra el Barça. Habló de conspiración arbitral, de que estábamos frustrados porque el Madrid no esté a 4 puntos, porque estaba todo preparado, de que nadie les defendía y de que sus jugadores no eran de este mundo. En fin otra vez Mourinho llorando, otra vez dando la nota, otra vez con el traje de camarero del KFC manchado de grasa de pollo. Ahí precisamente está la diferencia.

Spacepower

1 comentario:

Ringo Kid dijo...

Se confirma, Barça y RM no juegan al mismo deporte. Mientras el Barça practica probablemente el mejor futbol de la historia (no se porque me apetece una Carlsberg), el RM juega mal, a pegar patadas y a protestarlo todo, llegando incluso al esperpento del fuego amigo, agrediendose entre ellos.
Lo de Mou era una cortina de humo más, enseñando un papel que eran los 13 platos del menu degustación de la cena de Navidad del club, desvió la atención hacia el árbitro y hacia Valdano por no defender al equipo, dando asi carnaza a la prensa para que no hablen que tras seis meses aun no ha hecho jugar bien al RM. El mismo lo reconoció al decir que no pagaría ni 1 euro por ver a su equipo y que prefería la liga vietnamita.