lunes, 5 de julio de 2010

DON RAFAEL

Entre toda la vorágine de este Mundial, se coló ayer la final de Wimbedon en la que Rafa Nadal ganó su segundo título y su octavo Gran Slam (igualando a Connors, Lendl o Agassi). Parece que nos estemos acostumbrando a que Nadal arrase en las pistas, sobre todo en las de tierra, pero habrá que reconocer que es el tenista más importante de la historia del tenis español. Pero lo más remarcable es su capacidad de mejora que, al parecer, no tiene límites. Hace 5 años era un jugador que sólo ganaba en tierra batida, sin apenas saque, y sin posibilidades en hierba o pista sintética. Su evolución en hierba ha sido alucinante desarrollando un saque muy preciso y efectivo además de perfeccionar un revés cortado que ya está al mismo nivel que el de Federer. Por eso tiene más merito, los demás tenistas tienen que contratar psicólogos para concentrarse en los partidos, él no lo necesita, él juega mejor cuando hay más presión, él sólo tiene que preocuparse de mejorar y ahora tiene una obsesión: completar su Gran Slam con el Open USA y, si las lesiones se lo permiten no tengáis ninguna duda de que lo hará. ¡Felicidades campeón!

Spacepower

1 comentario:

Anónimo dijo...

Enorme Rafa! es un modelo a seguir por los chavales.

Saludos.