100 DÍAS DE SANDRUSCO

Si mis cuentas no fallan , mañana cumple Rosell sus 100 días de mandato. Como no sé si mañana tendré ganas o tiempo de escribir procederemos a realizar un análisis lo más objetivo posible sin que me afecten las simpatías personales. Hay que decir que su aval (lo digo sin segunda intención) es grande debido al gran número de votos en la urna que, sin ningún género de dudas, son síntoma de las ganas de cambio que tenía la masa social. No tuvo competencia en las urnas, debido a la baja calidad de los rivales, unos por poco tirón personal y otros por la precipitación en presentarse. Así Rosell ganó muy sobrado, podía partir de cero. Los primeros días no fueron muy afortunados, al cerrar en falso el tema del Presidente de Honor que, si bien había un fondo de razón, se fallaron bastante en las formas, creando una pequeña crisis innecesariamente. A ello contribuyó el hecho de que el nuevo portavoz Toni Freixa todavía arrastra tics de doberman de su época en la oposición. Tics que espero se le vayan quitando conforme cambie el chip. En fin, la segunda gran característica del mandato de Rosell es el continuísmo en lo deportivo, pues no ha destituido a un solo entrenador de las secciones profesionales, decisión que es comprensible en fútbol y basket, y es menos aceptable en balonmano donde llevamos dando tumbos desde hace cinco temporadas. Creo que a Pasqui se le ha dado una última oportunidad, espero que la aproveche. Se ha fichado poco en fútbol, probablemente el caso Cesc junto con los agujeros en la tesorería, han provocado esta situación, aunque es posible que algo se pueda arreglar en el mercado de invierno pues las carencias de esta plantilla son más que evidentes. El último tema es la guerra de contabilidades y la famosa "Due Dilligence". He de decir que me parece muy bien que se lave la ropa sucia del club, y si Laporta, Oliver y compañía han despilfarrado o han metido la mano en comisiones, hay que decirlo a los socios y compromisarios en la forma establecida estatutariamente, lo que no me parece bien es que el Marca sepa detalles de tarjetas, facturas del Luz de Gas, antes que lo sepan los socios y si es posible que éstos mantengan la máxima confidencialidad sobre la información recibida. Tampoco me pareció bien el hecho de que se dijera que se vendía a Chigrinski para pagar nóminas. Si es cierto, es una mala imagen innecesaria para el club y si es falso peor todavía. En fin, que cierto tufo revanchista ha marcado este inicio de mandato de Rosell y el alarmismo innecesario en lo económico han sido las notas negativas. En lo positivo, la sensación de tranquilidad y seriedad que se transmite desde presidencia que contrasta con épocas recientes no demasiado lejanas. "No us fallaré" dijo Rosell en su discurso en la noche electoral, espero que no estuviera mirando únicamente a los nuñistas y a las 100 familias catalanas, confiemos en que no falle al Barça, que es el único que de verdad nos interesa.

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