Hoy volvemos al Sánchez Pizjuan, un estadio donde siempre ha sido difícil ganar y donde Pep dijo haber pasado sus peores veinte minutos como entrenador la temporada pasada, cuando tras ir ganando 0-3, el Sevilla se puso 2-3 y tuvo alguna ocasión para empatar. Pero, para ganar esta Liga, habrá que ganar también en Sevilla, en Villarreal y/o quizás en el Bernabéu donde curiosamente, tras el maldito pasillo del 2008, los blancos todavía no han conseguido ganarnos.Probablemente el Barça saldrá con un plus de presión tras la comodísima victoria de ayer del Madrid, quien ha sabido ganar sus dos partidos sin su máxima estrella , ante dos equipos menores como Racing y Hércules, este último con seis bajas respecto a su equipo titular, que ganó en el Camp Nou. Pero lo más trascendente del día de ayer no fue este insustancial partido, sino las declaraciones de su presidente, el todopoderoso Florentino Pérez, en una entrega de insignias a socios veteranos por la mañana. Pérez hizo suyas todas las quejas de Mourinho y afirmó que "esto también es señorío" pues ser madridista implica denunciar las injusticias. Está claro que este hombre está desesperado, y Mourinho es su último tren para reengancharse a sus petulantes promesas cuando fue elegido presidente. Un presidente que alardea con volver a una grandeza y una excelencia supuestamente perdidas. "Señorío" como él mismo dice es reconocer los méritos del rival, cosa que lleva negando su club y el aparato mediático que le rodea desde que él entró en la presidencia. Se habla de que el Barça gana por el "villarato" porque tiene al presidente de la FEF a su favor, tanto en España como en Europa, ahora se habla de "calendariato" porque el que hace los calendarios es catalán y socio del hermano de Pep. Llevan algunos días en el tebeo de Inda dejando caer que la sombra del dopaje rodea la liga española, curiosamente las dos últimas temporadas, las que ha ganado la Liga el Barça, y en foros más extremistas, concretamente el juntaletras "latigo" Serrano en el Marca,se ha denunciado abiertamente el dopaje de los jugadores del Barça. Todo , absolutamente todo menos reconocer que el Barça juega mejor y punto. ¿Es esto señorío amigo Florentino?
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