Anoche se demostró una vez más que los campeonatos los ganan los equipos y las finales los "killers".Diego Forlán cumplirá 31 años el próximo miércoles (día de la Final de Copa del Rey) y puede llevarse él solito un doblete histórico para el "pupas" que no ganaba un título desde 1996, desde los tiempos del "tal y tal". Diego es un ejemplo de profesionalidad, dicen que se cuida de una forma obsesiva, pesando lo que come y con entrenamientos personalizados en el gimnasio. Ha sido bota de oro con el Villarreal y con el Atlético de Madrid (no sé con cuál tiene más mérito) y ha sido un jugador que ha dado más rendimiento a los colchoneros que el propio Fernando Torres. El uruguayo, que llegó a ganar una Premier League con el Manchester United, se puso en el mercado el verano de 2007, y también en el 2008, cuando su padre llegó a decir que estaba loco por ir al Barça, el entonces tandem Txiki-Ferrán Soriano se decantó por Henry (hoy conocido por el palmero galo), uno de los mayores blufs de los últimos años. Estoy convenido de que el uruguayo hubiera sustituido mejor a Eto'o que el depresivo serbo-sueco, y con un coste mucho menor, pero eso es fútbol-ficción y ahora sólo importa el Valladolid, y jugará Bojan...
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