El Barça dio una auténtica exhibición el sábado, y eso pesó en su rival, que ayer estuvo a punto de perder definitivamente la Liga. Solo un golpe de calidad de Ronaldo, es tonto pero muy bueno, pudo a última hora rescatar del naufragio a ese Titanic llamado Madrid, que chocó con un iceberg llamado Barça hace unas semanas, y que se está hundiendo poco a poco. Mañana el Tenerife no debe ser rival para el Barça, y esperaremos plácidamente al miércoles para ver si el Mallorca liquida definitivamente a los blancos. Si no, no pasa nada, habrá que ir a Sevilla como se fue a Vila-real, a ganar la Liga, y así es muy difícil perder. En Madrid hay nervios, no hay más que oir las ruedas de prensa de Pellegrini, con preguntas referidas a Mourinho que el chileno debe aguantar estoicamente. Si el Barça gana la Liga, de lo que estoy convencido, en Madrid van a caer muchos palos, en todas las direcciones, pero especialmente hacia el entrenador que no aguantará ni que acabe el presente mes de mayo Sería conveniente no marear la perdiz con fichajes para la temporada que viene, porque ¿qué pensará Bojan jugando de titular si se le coloca como moneda de cambio por Villa? Sólo espero un poco de prudencia y hablar únicamente de fútbol los próximos días porque creo que merecerá la pena.
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