HARTOS DE MOURINHO

Yo no se vosotros, pero estamos en Septiembre y yo ya estoy harto de Mourinho. Me hice a principios de temporada el firme propósito de ignorarlo pues tenía y tengo la convicción de que es un provocador nato y en este juego él siempre sale ganando. Pero la insistencia de los medios de la capital han llegado a un empacho tal que está compitiendo codo a codo con Belén Esteban en número de horas de televisión en exclusiva. Todo lo que hace está bien, todo lo que dice es inteligente y si el equipo jugara bien sería, poco menos, que Dios. Mou no mea colonia, orina Chanel nº 5, como poco. Con los máximos parabienes de su más alto mecenas, reparte a diestro y siniestro, con una falta de gracia más que evidente, con una prepotencia y soberbia que haría sonrojarse a Narciso y con un evidente objetivo: desestabilizar al máximo rival, su rival. No creo que dedique muchos artículos al personaje, probablemente este será el último o el penúltimo (depende de él) pero personalmente no me parece tan inteligente. Es lo que se suele llamar un bocazas, habla sin que le pregunten, se queja de todo, menos de lo que hace él y se muestra arrogante, una arrogancia que llamaremos claramente a la portuguesa, de la que ya pudimos "disfrutar" antes con Figo o el mismísimo CR7. Será difícil abstraerse de esta vorágine, quizá el único enemigo que tiene Mourinho es su propio equipo, pues él vive de resultados y otra temporada en blanco puede ser su mejor antídoto, aunque costará doblegarlo, se retorcerá y hará daño, mucho daño, pues realmente ese es su gran objetivo.

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