Pep está cabreado y lo peor, está solo. El Madrid lleva en guerra desde el mes de septiembre, y el Barça seguía hasta el sábado con el discurso zen que tan nervioso ponía a alguno.Pero Pep se ha dado cuenta que Mourinho le ha ganado mucho terreno pues, como ya hizo la temporada pasada ha preparado un combate desigual, quejándose sistemáticamente de que siempre jugaba contra diez para, definitivamente poder entrar en un cuerpo a cuerpo en el que el Barça tiene mucho que perder. Todo ello ha ido aderezado por un trabajo constante de Florentino en los estamentos, para conseguir que al Madrid le arbitren a la carta. Si a ello añadimos , la constante calumnia lanzada desde los voceros de reino, especialmente del diario más vendido de España que como bien dijo José María García se había convertido en el boletín oficial del Real Madrid, y que otros como Intereconomía y el As se han subido al carro han creado una realidad virtual en la que los árbitros ayudaban a los jugadores del Barça a ganar (menos cuando jugaban con España que ganaban gracias a Del Bosque), los jugadores se dopaban (menos cuando jugaban con España que había controles serios) y los jugadores eran independentistas y se reían de la españolidad de Sergio Ramos y Xabi Alonso(?)(menos cuando jugaban con España que ganaban Eurocopas y Mundiales con su escudo). El club necesita un cambio de discurso antes de que sea tarde y Pep, con su estilo, infinitamente más educado que el de Mourinho, se ha encargado de abrir el fuego. Y es que parece que el trabajo sucio de Florentino ha calado en la UEFA y estaba ya designado Proença para la primera semifinal, hasta que Pep dijo basta y cambió a última hora la designación. Ya no hay marcha atrás y el discurso se va a mantener el resto de la temporada, especialmente estos próximos 10 días, en los que nos jugamos algo más que una Final de Champions. Lo que sería importante es que el presidente y la prensa afín se dieran cuenta de la importancia del momento y dieran un paso al frente para ayudar al equipo que ahora parece más desamparado que nunca. Estamos en guerra.
Spacepower
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